Al momento de escribir estas notas es probable que aún queden ajustes por realizar en los tarjetones electorales, esto es, en los acuerdos y desacuerdos de las campañas, pero la información disponible ya permite hacerse a una idea general de los actores e intereses que estarán en disputa.
Para la gobernación podría decirse que la tarjeta electoral tendría los siguientes nombres y partidos: Lina María Arango (avalada por Alianza Verde con el acompañamiento del Polo Democrático, Unión Patriótica y Colombia Humana); Eduardo Cardona (Centro Democrático); Diego Naranjo (avalado por el partido Conservador en coalición con el partido Liberal, el MIRA, Colombia Renaciente y el partido de la U) y Víctor Manuel Tamayo (aunque inicialmente buscó el aval del partido Conservador, finalmente fue inscrito por Colombia Justa y Libres en alianza con Cambio Radical, la ASI y el MAIS).
Lina María Arango es una profesional en Gobierno y Relaciones Internacionales y magíster en Desarrollo Regional. En 2007 fue candidata al concejo de Pereira por el partido Liberal.
Eduardo Cardona es un abogado que fue concejal liberal hace 15 años.
Diego Naranjo fue alcalde de Belén de Umbría y representante a la Cámara por el partido Conservador, mientras que Víctor Manuel Tamayo fue representante a la Cámara y gobernador de Risaralda por el mismo partido y candidato al mismo cargo en la campaña de 2015 por el grupo significativo de ciudadanos Sentimiento de Todos.
Para valorar el significado de las campañas en curso conviene recordar que Sigifredo Salazar, actual gobernador, resultó electo con 185 mil votos, la cifra más alta desde que se eligen gobernadores. Su campaña tuvo el concurso del partido Liberal en un acuerdo que le permitió a este partido obtener la alcaldía de Pereira con Juan Pablo Gallo, pero además conformó una coalición donde participó Cambio Radical, el Mira, el movimiento Firmes con Luis Enrique y el Centro Democrático.
En 2015 el candidato Tamayo rompió con el conservatismo y logró sumar 148 mil votos en una campaña que contó con el partido de la U, y, aunque no oficialmente, con el apoyo del representante liberal Diego Patiño.
En 2015 la candidata a la gobernación por el Polo Democrático Alternativo -PDA Luz Yasmid López consiguió 19 mil votos, la cifra más alta obtenida por dicho partido en estas contiendas.
Al revisar antecedentes de los apoyos partidistas y las coaliciones, se nota incoherencia y flexibilidad extrema. Así, por ejemplo, un sector del partido Liberal apoyó a Sigifredo Salazar en Pereira y, simultáneamente, a Víctor Manuel Tamayo en el resto de los municipios. El Mira estuvo con Israel Londoño en Pereira y con Sigifredo Salazar en el departamento.
Las siguientes cifras resumen el resultado electoral para gobernación de Risaralda en 2015.
Como antecedente inmediato también deben considerarse los resultados de las elecciones a Cámara de Representantes en 2018. El partido Liberal eligió dos representantes con un total de 65 mil votos; el partido Conservador, uno con 49 mil votos y el Centro Democrático el otro con 52 mil sufragios.
Dinámica general
Para atender las divisiones internas pero mantener una presunta unidad, algunos partidos seguramente volverán a utilizar el expediente de dejar en libertad a sus seguidores al momento de votar por gobernación o alcaldías. Este fue el caso, por ejemplo, del Centro Democrático en 2015 que dejó en libertad a sus seguidores para votar por alcaldía en Pereira. Algunos observadores consideran que, en la actual campaña, dadas las dificultades internas del partido Liberal, este también podría ser el expediente utilizado para la gobernación de Risaralda.
Están por definirse, además, los impactos electorales esperados de la detención por corrupción de alcaldes, exalcaldes y funcionarios en Dosquebradas y Santa Rosa de Cabal. En 2015 ambos municipios eligieron alcaldes inscritos por el partido Conservador.
También esperan definición as orientaciones que en Pereira las campañas (por firmas) de Carolina Bustamante y de Jesús Hernández entreguen para la elección de gobernación.
En el caso del Centro Democrático, no parece seguro que se mantengan sus candidaturas a la gobernación y a la alcaldía de Pereira. De llegarse a corroborar esta hipóstasis, es probable que se genere una orientación de la dirección nacional para respaldar a Tamayo y vuelvan a dejar en libertad para la elección de alcalde.
En Pereira el PDA, Risaralda Humana y la UP tienen como candidato a la alcaldía al exconcejal Carlos Alfredo Crostwhaite. La Alianza Verde avaló la candidatura de Alejandro García. Además, Risaralda Humana presentó lista cerrada al concejo y la Alianza Verde y el PDA tiene cada uno su propia lista. Estas últimas son decisiones difíciles de entender para el ciudadano corriente.
Los representantes liberales Juan Carlos Reinales y Diego Patiño consiguieron que, en su momento, las directivas nacionales del Partido autorizaran el respaldo a la candidatura de Israel Londoño a la gobernación. Pero las presiones del alcalde de Pereira hicieron que se diera marcha atrás y se confirmara la coalición con el partido Conservador y su candidato Diego Naranjo, lo cual pondrá a prueba la capacidad de los directivos nacionales para transformar en realidad el acuerdo, ahora que Israel Londoño ha cancelado su campaña para sumarse a la de Tamayo.
Una de las novedades en esta coyuntura se relaciona con el partido Conservador. La llegada del exsenador Habib Merheg luego de haber sido aceptado para declarar ante la Jurisdicción Especial para la Paz y de su esposa Juliana Encizo introdujo nuevos ingredientes político electorales. En un comienzo ella presentó su aspiración a la gobernación de Risaralda por la Alianza Social Independiente -ASI, pero no tuvo el eco suficiente y decidió aceptar su postulación en la lista de los conservadores a la Asamblea. Ya antes había ocupado una curul allí. Es clara, en consecuencia, la influencia que la denominada casa Merheg conserva en la política risaraldense y estas elecciones darán nuevas pistas al respecto.
En 2015 el partido de la U que gobernaba en Pereira se enfrentó a la campaña del candidato liberal Juan Pablo Gallo y perdió de lejos. Ahora todo indica que, con algunas excepciones, la dirigencia de lo que aún queda de este partido está alineada en la campaña de Carlos Maya. Atrás parece haber quedado el fuerte control político del exsenador Carlos Soto quien intentó, infructuosamente, sumarse a la candidatura de Maya.
El expediente de las firmas
A nivel nacional la estrategia de avalar candidaturas por firmas en las elecciones regionales tuvo un crecimiento desmedido. Pasó de 213 movimientos ciudadanos en 2011 a 1.253 en 2018. De estos, 107 lo hicieron para presentar candidatos a alcaldías.
Según El Espectador (19/08/19) las razones para hacer uso de este procedimiento son obvias: “el ungido puede salir a las calles para sumar apoyos, logrando reconocimiento; recoge recursos sin que se vigilen los montos; puede posar de independiente y marginarse de organizaciones políticas tradicionales —muchas de ellas desprestigiadas— e incluso, bajo el paraguas de las firmas y el supuesto respaldo ciudadano, tiene licencia para gestar escenarios de negociación con los partidos, bien sea para agregar maquinarias, establecer alianzas o pactar los cargos. En otras palabras, una patente de corso para hacer campaña anticipada y medir el pulso político antes de la inscripción”.
En la campaña a la gobernación de Risaralda buscaron firmas lsrael Londoño (quien fue concejal liberal y alcalde de Pereira por el partido de la U) por el movimiento “Risaralda Incluyente, firme con Israel” No obstante haber recogido 91 mil firmas (54 milo avaladas), declinó su aspiración y se sumó a la campaña de Tamayo a quien ya había acompañado cuatro años atrás.
También estuvo acopiando firmas Francisco Valencia, exgerente de la empresa Aguas y Aguas de Pereira, pero en su momento abandonó su proyecto y decidió sumarse a las aspiraciones de Naranjo el candidato de su partido. Se habla de 110 mil firmas conseguidas.
En el caso de la elección a la alcaldía de Pereira, por ejemplo, el dos veces gobernador del Risaralda, Carlos Alberto Botero, recibió el aval de Cambio Radical aunque ya había recogido 78 mil firmas. También usaron el expediente de las firmas Mauricio Salazar, Carolina Bustamante y Jesús Hernández. En Dosquebradas fue Diego Ramos el candidato de origen conservador quien buscó firmas.
En esta forma, si bien las coaliciones básicas que operaron en las campañas de 2015 se renovaron, hoy se cuenta con mayor presencia de las candidaturas por firmas.
También deben tenerse presentes otros hechos políticos. Cambio Radical, quien viene de haber obtenido 43 mil votos para la Cámara, no está con Diego Naranjo, mientras que cuatro años atrás estuvo con Sigifredo Salazar.
El CD presentó en estas elecciones nombres propios a gobernación y a algunas alcaldías, en la anterior campaña territorial se sumó a coaliciones.
Por su parte el Mira, no obstante los 35 mil votos conseguidos para Cámara, continúa sin presentar candidatos propios a gobernación y alcaldías.
En los meses previos a la inscripción de candidaturas, las personas jurídicas de MAIS, AICO, ASI, Colombia Justa Libres estuvieron bastante activas ofreciendo avales y participando de coaliciones de todo tipo.
En 2015 para gobernación hubo 3 candidaturas, hoy figuran 4. Para la alcaldía de Pereira hubo 3 candidatos, a la fecha hay 9 en campaña.
El comportamiento de todos los partidos y movimientos políticos en este departamento expresa el inequívoco reconocimiento de que ninguno de ellos gana solo y que son necesarias las coaliciones.
Por último, los lectores pueden hacerse a una aproximación a la estructura política de Risaralda observando los resultados de los partidos y movimientos entre 2011 y 2015 para alcaldías, concejos y asamblea que aparecen en la tabla anexa. Este es un referente obligado para evaluar lo que suceda en las elecciones del próximo 27 de octubre.
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Oscar Arango Gaviria: Profesor Universidad Tecnológica de Pereira. Coordinador proyectos regionales
Foto obtenida de: https://jhdegihe702.wordpress.com/
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