La primera carga de profundidad fue el reconocimiento de que fue la expansión a Ucrania de OTAN de Biden lo que causó el conflicto. Aunque este no fue el autor intelectual pues quien decidió violar la promesa a Gorbachov (a cambio nada menos de que permitiera la reunificación alemana, (un país que sufrió 27 millones de víctimas en manos alemanas) de que ésta no se expandiera 1 al este, fue Clinton; y de ahí para acá los presidentes han seguido una estrategia hegemónica diseñada desde el derrumbe soviético por Cheney/Wolfovitz, desarrollada para Europa por Brzezsinski (secretario de estado de Carter) en A plan for Europe, libro en el cual sostenía que USA podría expandir impunemente porque Rusia era incapaz de defenderse; lo cual era cierto en esa década pavorosa de los 90 en que la corrupción se devoró al país bajo el borracho corrupto Yeltsin. Así, USA ha venido siguiendo al pie de la letra la actualización de Brzezsinski por la Rand corporation sobre como debilitar a Rusia, y de paso a Europa al destruir la competencia alemana. Pero vino Putin y levantó el país de esa postración, al tiempo que, simultáneamente, lo fortalecía militarmente; y buscaba un nuevo esquema de seguridad para Eurasia que incluyera a Rusia en Europa. Repetidamente hizo este planteamiento, particularmente en la conferencia de Munich 2007, la misma que ahora reúne a los despistados europeos. Pero el prejuicio que viene de la ilustración de que Rusia, como país atrasado que había sido retenido en la edad media por los mongoles, no pasó por la modernidad sigue vigente. El caso es que el proyecto Ucrania de V Nuland y Blinken, que ha fracasado como iniciativa americana, es revivido por los europeos. Y estos han sido humillados al punto de Vance recordarles la importancia de la libertad de opinión en las democracias, y en Alemania donde meten presa a la persona que mencione el genocidio de Gaza.
La historia que sigue es bien conocida. La CIA dirigida por V Nuland derrumbó al legitimo presidente que, racionalmente para un país entre dos potencias, buscaba mantener la neutralidad, e instaló un nuevo gobierno totalmente supeditado a USA, incluso escogiendo ministros, después de una intensa actividad subversiva a través de ONG de USAID. Zelensky gana las elecciones con una plataforma de paz, pero apenas asume el poder, en parte bajo presión de poderosísimos grupos nazi, desencadena una guerra contra los oblast del esta habitados por rusos; con lo cual se inicia la guerra desde 2014 bombardeándolos y ocupándolos con brigadas de extremistas como la pavorosa Azov, por 8 años. Al tiempo que desconoce el acuerdo de Minsk supuestamente garantizado por Alemania y Francia (que sabemos por Merkel fue un vil engaño) mientras que paralelamente USA descalificaba la insistencia de Putin de que Ucrania era una línea roja infranqueable: ¿qué líder quiere tener misiles a 4 minutos de Moscu, Kennedy no arriesgó una guerra nuclear para no tenerlos en Cuba? Hizo un ultimo intento en Dic/21 y ante el desdén por sus preocupaciones por la seguridad de Rusia y la inminente invasión de los oblast rusos del este por tropas de Kiev, lanzó la operación con una columna de tropas que se acercó a Kiev, aunque con un decimo de la magnitud de tropas de las que hubiera necesitado si efectivamente intentara tomarse a Ucrania; columna que Ucrania resistió y él retiró por sugerencia de Francia y Alemania para busca un acuerdo que efectivamente se logró en Estambul en Marzo; el cual fue torpedeado por Johnson a nombre de Biden: si firma pierde nuestro apoyo. Esta situación es la que debería tener en cuenta Trump al atacar a Zelensky. Pero lo fundamental es que el mantra unprovoked attack parloteado por los lideres occidentales es totalmente falso, como lo vió y manifestó incluso el Papa Francisco.
De todas maneras, Trump tiene toda la razón al culparlo de la prolongación de la guerra durante tres años; aunque tanto en Minsk como en Estambul Estados Unidos e Inglaterra lo presionaron para que abandonara la mesa de negociaciones y siguiera adelante con la guerra sobre la base de su compromiso. Ahora Zelensky es efectivamente un obstáculo para lograr un acuerdo de paz efectivo; sin duda se suma a Biden y Johnson como principales culpables de esta trágica aventura americana. Así como también tiene toda la razón Trump al decir que Zelensky tuvo varias oportunidades para poner fin a la guerra; él mismo impidió una solución al prohibir por decreto negociar y persistir en una guerra imposible de ganar. Aunque es importante aclarar que Trump no culpó a Zelensky por iniciar la guerra; fueron los medios británicos (siempre conspirando y traicionando) quienes distorsionaron sus palabras y Zelensky reaccionó lo suficientemente mal, rechazando el negocio de los metales raros, como para enfurecer a Trump. El Proyecto Ucrania es ahora un esfuerzo de la Unión Europea e Inglaterra y Zelensky es ahora un blanco fácil.
Sobre el conducto de la guerra los resultados actuales son los lógicos que incluso Obama esperaba por la escalatory dominance (escalada dominante) de Rusia. Después de unos avances iniciales y de una contraofensiva desastrosa que Zelensky está repitiendo en Kursk, al punto de debilitar el frente oriental, los rusos avanzan imparables. Se necesita ser UVDL, Stoltenber/Rutter, o Starmer/Macron, para persistir en la negación de que perdieron la guerra y de que seguir enviando armamento es prolongar la masacre de ucranianos a quienes usarán hasta el último: como decían senadores Romney/Graham es una eficiente inversión debilitar a Rusia si los muertos los pone Ucrania. Pero ahora son los europeos los que van a mantener a Ucrania en esa tarea con la tontería convertida en mantra de que Putin seguirá con Europa.
Gracias a Dios Trump recupero el contacto con la realidad y esta haciendo lo posible por detener esta locura. Ya los medios están resucitando el rusogagte para debilitarlo, pero la guerra ya va a quedar en mano de estos tozudos europeos, cuya torpeza garantiza que ya no resistirán por mucho tiempo. Tres países se destacan como warmongers (guerreristas). Primero Inglaterra que con una agresividad de eximperio vergonzante ha sido el socio mas activo de Ucrania, MI6 participando en varios ataques terroristas en Rusia, enviando sus misiles strongshadow y ahora ofreciendo tropas para una misión que saben Putin no va a aceptar. Alemania aceptó dócilmente la destrucción de su economía, de una estructura de complementariedad con la economía rusa, por la supresión de la energía barata rusa de manera que su esquema energía de Rusia, seguridad de USA y mercado de China, se está derrumbando por la torpeza de un gobierno severamente incompetente del cual la Sra. Baembock con sus imbéciles declaraciones es un perla. Pero hay una enorme diferencia entre Inglaterra y Alemania: el odio obsesivo por los rusos viene de las disputas Inter imperiales de los dos siglos anteriores las que incluyeron la guerra de Crimea y la disputa por Afganistán, en el caso británico, los social demócratas alemanes construyeron una estructura de cooperación con Rusia la (ostpolitik de Brand) reemplazado el enfoque confrontacionista de la Democracia Cristiana; y gracias a la energía barata pudo construir sus fabulosos sectores de energía intensivos que ahora se están migrando en masa para Estados Unidos. Finalmente, la Francia de Macron que estuvo a punto de mandar tropas abiertamente (porque subrepticiamente todas las potencias de OTAN tienen militares operando en Ucrania) envió sus misiles Scout e insiste en que no se debe permitir una victoria rusa. Y un cuarto grupo adicional de países, Polonia y los Bálticos, que padecieron al imperialismo soviético, y viven en la paranoia de que Rusia es ahora la reencarnación de este imperialismo, resultando así tan agresivos como Inglaterra. El caso es que todos se reúnen a lamentarse de la traición americana y a alimentar la histeria paranoide de una amenaza rusa inexistente: el mantra de que Putin es una amenaza para Europa es un sinsentido considerando que ni tiene la capacidad militar logística y financiera, ni la motivación para apoderarse de la mitad de Ucrania. Pero ¿tiene Europa la capacidad fiscal para no solo incrementar su gasto militar como lo exige Trump sino también sostener a Zelensky con un flujo de recursos de la dimensión necesaria? Siguen en un delirio del cual solamente unos votantes hastiados de la estupidez de sus lideres les darán la patada fuera; lo que efectivamente esta sucediendo en las personas de Weidel de la AfD en Alemania y Le Pen del RN/NF en Francia. Esperemos que Europa recupere su tradición diplomática de hablar en lugar de imponer violentamente, superando la arrogancia anti eslava personificada en el extremo por la operación Barbarosa de Hitler. Y que sus lideres superen la infantil (Sachs) argumentación de que Rusia seguirá con Europa, una absoluta falta de seriedad que si se la creyeran en serio estarían invirtiendo el triple en gasto militar.
El balance es paradójico y contradictorio. Por una parte, se puede afirmar que Trump salvo al mundo de una guerra nuclear a la cual era conducido por los esquizofrénicos paranoicos mitómanos, con una severa pérdida de contacto con la realidad, de Biden, Blinken, Sullivan y Nulan, junto con los PM británicos, el peor de todos el monstruoso Johnson, consecuencia de su extrema agresividad y arrogancia con Rusia. Y que Trump está dando una salida a un conflicto que de no intervenir él, los europeos prolongarían hasta que ya no quede Ucrania que salvar. Su simple recuperación de contacto con la realidad, superando la hipnosis mediática, y una notable lucides en un tratamiento racional del problema, ya es un gigantesco salto adelante. Detrás de sus exabruptos y disparates hay una mente estratégica esta vez mejor asesorado que en Trump 1. Está saliendo del conflicto en Ucrania, que absolutamente carece de interés estratégico para USA, para concentrarse en la verdadera amenaza, China
Es cierto que su fórmula se puede criticar como una capitulación de Ucrania, pero esa es la realidad de la guerra: lo europeos no podrán evitar su colapso con los avances rusos y toda la situación de crisis económica y política. Mas rápido ven la luz, menos se prolongará el purgatorio de los pobres ucranianos, las víctimas de este horror usados por Estados Unidos/Inglaterra/OTAN para desangrar a Rusia. Muy injusto y triste que el intento de cambio de régimen buscado por occidente en Moscú, con la guerra y las sanciones, lo vengan pagando ellos. Por otra parte, los está matoneando en un extremo trumpiano: pretende que ésta pague el apoyo con un valor en recursos minerales del triple de lo que Ucrania ha recibido de Estados Unidos. Claro Zelensky rechazó esta imposición argumentando además que el convenio debe contener garantías de seguridad para Ucrania. Parece que han llegado a un acuerdo que implica que Estados Unidos estará involucrado en la seguridad de Ucrania como protección de sus inversiones en la explotación de sus metales y minerales. En qué resultará este proceso es incierto, lo único cierto es que los costos los sufren ellos siga o pare la guerra.
El prospecto es pues de un par de meses que Ucrania resista con el apoyo de Europa, a lo cual sus lideres se están comprometiendo. No será mucho tiempo más porque estas potencias carecen de los recursos de los cuales si disponen los americanos. Zelensky sale en cualquier momento presionado por Trump a sostener elecciones, sufriendo constantes derrotas en el frente (su aventura en Kursk no le dará el más mínimo poder de negociación); con una economía destrozada sostenida en pie por Estados Unidos; asediado por acusaciones de corrupción que al nivel de recursos enviados alcanza una dimensión monumental; impopular con la población y con sus tropas que acertadamente lo culpan de errores garrafales en la conducción de la guerra; y saldrá billonario para alguna de sus vilas en Venecia o en la Florida. El escenario más probable es que un nuevo gobierno sea forzado a la mesa de negociaciones en condiciones de carencia de poder de negociación alguno y que Trump logre una jugosa compensación en minerales raros, mientras que los europeos sin el apoyo americano se tendrán que tragar su fracaso. Pero lo fundamental es que un horizonte de paz está surgiendo gracias a Trump.
Ricardo Chica
Foto tomada de: AP News
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