La ruina de Medellín

¡Oh mi amada Medellín, ciudad que amo, en la que sufrido, en la que tanto muero!

Mi pensamiento se hizo trágico entre tus altas montañas,

en la penumbra casta de tus parques,

en tu loco afán de dinero.

Gonzalo Arango

A la entrada de los ascensores en el primer piso de la Alcaldía de Medellín hay o había, una pared tachonada de placas con reconocimientos, premios, diplomas y consagraciones que prácticamente abarcan todas bondades del paraíso. Entre otras, Medellín ha recibido el Nobel de Ciudades y ha sido declarada como Ciudad Discovery, Ciudad Inteligente, Ciudad más Transformadora, Ciudad Emprendedora, El Mejor Destino de escapada del Mundo, Uno de los diez mejores lugares para invertir en América Latina, Uno de los 20 lugares del mundo para visitar, Mejor Destino de Reuniones, Ciudad Educadora e Incluyente, etc. Esta manía coleccionista ha afectado de tal forma las administraciones locales, que hace poco se denunció que el actual secretario de Gobierno de Medellín se compró el último galardón internacional recibido por la ciudad: el Youth Leadership Award, presentado aquí como el “Oscar de la Política”[1].

Medellín y Antioquia, dúo indisoluble, tuvieron sus años de gloria, eso nadie lo pone en duda. La segunda mitad el siglo XIX sentó las bases para que las elites locales que gobernaran de mano con la iglesia católica y el partido conservador, aprovecharan la riqueza proveniente de la minería para dar el salto a la llamada industrialización paisa del siglo siguiente. Las fábulas y los relatos fantasticos de mineros y colonizadores y los logros del proceso de industrialización, fueron el abono de lo que ha sido nuestra mayor tara: el mito de la antioqueñidad o de lo “paisa” como un “nosotros excluyente”, sinónimo de progreso, viveza y triunfo ante las adversidades[2]. “A partir del siglo XIX, y con mayor intensidad en segunda mitad, de nuevo aquel sector (minería del oro) fue clave en la consolidación de un capitalismo industrial resultado de la tecnología minera, que encontró su continuidad histórica en la industria manufacturera del siglo XX. Esta continuidad dio, eventualmente, para alimentar el mito sobre un empresariado acendrado que se desarrolló en la sociedad antioqueña, para usar hermoso término de la minería, que se fue acrisolando en el pueblo antioqueño por su natural proclividad al comercio”…( citado por Federico García).

Este orgullo regional o patriotismo local nos pasea por la vida ataviados con una replica auténtica del Traje del Emperador.  La ideología paisa es un ego patológico porque, a pesar de las evidencias, seguimos empecinados en predicar a los cuatro vientos un empuje y una fortaleza que no son más que aguante y resignación. La paisanidad como idea de superioridad y cohesionador colectivo, alimentada a chorros por medios de comunicación, políticos y elites económicas, nos ha hecho ciegos ante los continuos latrocinios y despilfarros de los gobernantes, ha puesto a la gente a cantar alabanzas en medio de la pobreza, la violencia y la inequidad, y ha logrado que el pueblo haga propios los éxitos económicos de las minorías opulentas[3].  Y lo peor, ha hecho ingobernable y poco conviviente la ciudad, pues si todos somos vivos, nadie quiere ser bobo, al precio que sea. Es una condición de sobrevivencia. El cuento paisa nos ha hecho ciegos e ingenuos, pasto de la avaricia de las elites, de los corruptos y de los pillos.

Desde mi punto de vista, la ciudad de Medellín y en parte la Antioquia paisa[4], ha venido sufriendo un grave deterioro en la calidad de vida de sus habitantes, en las finanzas y bienes públicos mal administrados por la politiquería y las alianzas público-privadas. Durante los últimos años, la ciudad se ha ido sumiendo en la pobreza y la inequidad en gran parte agudizada por la llegada de medio millón de desplazados y doscientos mil venezolanos y venezolanas, todos con una mano atrás y otra adelante. A este deterioro paulatino de nuestra calidad de vida hay que sumarle un hábitat urbano deteriorado por la contaminación y un suelo urbano pasto de la especulación inmobiliaria. Tanto es así, que ya los ricos que vivían en el Poblado y las Palmas salieron corriendo para Rionegro y el Oriente cercano, dejando para nosotros este sumidero.

A estas circunstancias hay que agregar la crisis de nuestras Empresas Públicas, la gravísima situación generada por el proyecto Hidroituango, la enorme deuda del Metro de Medellín y la llegada a la alcaldía de la ciudad de un demagogo irresponsable y politiquero sin norte ni rumbo, el mismo que nos llevará a la bancarrota definitiva. Todo esto ha ido sucediendo bajo la omertá de los dirigentes regionales y la ideología regionalista que hace de colchón inflable de nuestras desgracias.  Veamos:

1. EPM: Estábamos Ahí

Nuestra memoria arranca en 2007, año en el que se aprueba el Convenio Marco de Relaciones Municipio de Medellín-Empresas Públicas de Medellín ESP también llamado “Convenio de Gobernabilidad”. Este instrumento estableció el marco de las relaciones entre Medellín y EPM y definió los principios y obligaciones de tal relación. Entre las clausulas de este documento están dos que a nuestro juicio abrieron las puertas para descapitalizar la empresa y propiciar que representantes del gran conglomerado económico regional, entonces conocido como Sindicato Antioqueño, llegaran a su Gerencia o a su Junta Directiva[5].

El primero tiene que ver con la exacción de recursos a EPM. El numeral 2.2.2. del Convenio de Gobernabilidad elevó las transferencias de los excedentes financieros de EPM al municipio en un 20% adicional al 30% establecido por el Acuerdo Municipal que reguló la materia. Desde esa fecha ningún alcalde se ha bajado del 50% de esas transferencias. Entre los años 2007 y 2013, EPM transfirió al municipio 4.5 billones de pesos, entre 2008 y 2017 transfirió 8.4 billones y para periodo 2020-2023, se calcula que el monto de las transferencias ascenderá a 7.25 billones de pesos. La ubre eléctrica[6].

El segundo hace relación a la disposición del Convenio de Gobernabilidad que abrió las puertas a la injerencia de los intereses del gran empresariado antioqueño en la Junta Directiva.  El numeral 2.1.2., establece que la Junta deberá contar con 9 miembros, cinco de los cuales serán independientes y cinco deberían permanecer. De esta manera se entregó un bien publico al manejo omnímodo de diez ilustres particulares.

En desarrollo de este Convenio de Gobernabilidad EPM adopta un Código de Gobierno Corporativo siguiendo los modelos de la Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo (OCDE), de la Corporación Andina de Fomento-CAF, y las regulaciones de la Superintendencia Financiera de Colombia[7].   En el capitulo 3 de este Código se fijaron los términos de la total autonomía de la Junta Directiva de EPM, lo cual, a mi juicio, esta en la raíz de muchos problemas de la empresa[8]. El virtuoso modelo de Gobierno Corporativo ha llevado casi a la quiebra de la empresa gracias a las pésimas decisiones de inversión, a los excesivos sobrecostos e incumplimientos en las obras y a la opacidad de muchas de sus decisiones. Veamos:

. En el año 2003 EPM ingresa como accionista en el proyecto de la Represa Bonyic en Panamá. Esta obra que se inició valiendo 50 millones de dólares, terminó costando 314 millones de dólares[9].

. En el año 2006 la Junta directiva de EPM aprobó la compra del 50% de Orbitel, empresa de comunicaciones que acababa de recibir la licencia de Wimax, un sistema de internet inalámbrico que pronto fue rebasado por el Wifi y la telefonía móvil. En esta vuelta se perdieron 85 millones de dólares[10].

. En el año 2009 se obtiene la licencia para la represa de Hidroituango y en el 2010 se inicia su construcción. Merced a equivocadas decisiones técnicas y a manejos poco claros, hoy los sobrecostos y dineros dejados de percibir han sido tasados por el Contraloría General de la República en 4 billones de pesos y cursa una demanda por 9.9 billones contra los contratistas de la obra[11]. Y en el camino, sin haber producido siquiera un kilovatio, EPM ha tenido que desembolsar, por concepto de regalías o ganancias anticipadas, la suma de 205 millones de dólares a la gobernación de Ramos Botero y 100 millones de dólares a la de Fajardo[12].

. En el año 2013 EPM-UNE se “fusiona” con Millicon. Merced a una cláusula del contrato, el manejo y control de la empresa queda en manos el accionista minoritario[13].

. En el año 2013 EPM invierte 113 millones en una empresa dedicada al mantenimiento de plantas de aguas residuales de México. Las pérdidas acumuladas a la fecha alcanzan la suma de 72 millones de dólares[14]

. En el año 2014, se compra por $227 millones de dólares el Parque Eólico los Cururos en Chile. El mismo se vende en 2019 por un valor de 138 millones de dólares. Este negocio deja perdidas cercanas a los 700 mil millones de pesos[15].

. En año 2015 se aprueba la compra de Aguas de Antofagasta en Chile, por un valor de 965 millones de dólares. Se estima que el valor real de esta empresa ascendía 400 millones de dólares[16].

Todo esto se ha conjugado para que hoy la empresa pierda valor a pasos agigantados, empiece a salir de activos estratégicos y como ya es tradicional, siga viviendo del cobro de tarifas en un mercado monopólico, renunciando a su expansión a nuevos y prometedores negocios[17]. La tapa de este desastre es Hidroituango.

2. Un Metro de infamia

 La obra que por antonomasia refleja todas las perversiones del urbanismo monumentalista, derrochador, agresivo y corrupto, es el Metro de Medellín. Y casualmente, es la obra que merced a un increíble lavado de cerebro colectivo, se ha erigido en el símbolo de la ciudad, del empuje y del progreso local. La construcción del Metro de Medellín prevista para cinco años tardó 12, incluyendo tres con obra totalmente parada; los trazados, diseño y longitud originales fueron cambiados sustancialmente y su paso por el centro de la ciudad, decidido a última hora, generó enormes e irrecuperables daños en su historia y arquitectura[18].

El Metro de Medellín inicialmente proyectado a un costo de U$562.000.000 (quinientos sesenta y dos millones de dólares) terminó costando  U$2.174.000.000 (dos mil ciento setenta y cuatro millones de dólares), dineros, que entre otras cosas, permitieron sacar de la bancarrota a la cementera y la siderúrgica locales, enriquecer a los especuladores del suelo; y llenar los bolsillos de la burocracia y la mafia local. Existen pruebas y procesos penales que demuestran que la escogencia y contratación del Consorcio Hispano- Alemán Metromed, fue el fruto de las intrigas y la corrupción mas descaradas.  El kilómetro del Metro de Medellín resultó tanto o más costoso que un kilómetro del Eurotúnel o túnel del canal de la Mancha que conecta bajo el mar a Francia con Inglaterra[19].

La deuda del Metro de Medellín fue definida por la Ley 86 de 1989 y renegociada en mayo del 2004. El plazo para su pago se pactó a 83 años y significó la renuncia a una millonaria demanda de EPM a Isa-isagen y la pignoración y entrega a la Nación del 10% de la sobretasa de la gasolina de Medellín y todos los municipios del Valle del Aburrá y del 40% del impuesto departamental al tabaco y los cigarrillos. Por esta vía, además de subsidiar el funcionamiento del Metro, terminamos pagando el transporte más caro del mundo[20].

De Medellín, el Metro solo tiene el nombre. Su Junta Directiva es un enclave nacional, pues en ella 5 miembros son nombrados por presidente de le Republica y 4 representan los gobiernos departamental y municipal, haciendo casi nula la gobernabilidad de ese monstruo sobre rieles, pues, además, la Junta tiene una composición de empresarios blancos y calanchines similar a la que se tomó la Junta de EPM.

A pesar haber construido una imagen de eficiencia y solidez, el Metro de Medellín es hoy una calamidad. Pensado para ser el eje estructurante del transporte de la ciudad, la Empresa Industrial y Comercial Metro de Medellín ha terminado convertida en un botín de la politiquería liberal heredera de Bernardo Guerra Serna, se ha especializado en bloquear cualquier solución de transporte que no pase por su monopolio, ha sumido en la bancarrota el Sistema Metroplús, carga con enormes costos y retrasos en las obras que emprende, define a su antojo cualquier propuesta de movilidad para la ciudad y solo es sostenible si funciona con sobrecupo[21]. Y como si todo esto fuera poco, el actual alcalde ha emprendido la construcción de otro ramal del Metro a un costo de un billón y medio de pesos, la destrucción de 1.450 bienes inmuebles y perdida total de la movilidad en el occidente de la ciudad. Está será la próxima feria del derroche y la corrupción paisa.

3. Quintero Calle: el asaltante del futuro

El pequeño circo armado el día de la inscripción de la candidatura de Quintero Calle no hubiera sido nada diferente a un exceso tropical, a no ser porque reveló anticipadamente al candidato de marras: una figura de opereta delineada por un formidable aparato comunicacional soportado en bodegas de redes sociales y guiones de historytelling elaboradas por expertos en marketing digital.

Siendo candidato el actual alcalde construyó una narrativa que hablaba de sí mismo como un joven pobre de las barriadas limítrofes de la ciudad, un niño que creció en medio de las necesidades pero que merced a su deseo de superación, alcanzó a ser viceministro del gobierno de su cuarto jefe político.  Tambien incluyo en el menú el cuento de que era un candidato independiente, que nada tenía que ver con el establecimiento y que su candidatura no le debía apoyos a ningún partido o movimiento político[22].

Pocos días después de elegido y cuando empezó a anunciar su gabinete, quedó al desnudo la realidad del tal Independiente: todos sus apoyos políticos y económicos procedían de lo más oscuro de la politiquería local y regional, desde godos corruptos y mafiosos que habían hecho de municipios vecinos a Medellín sus botines, hasta demagogos de izquierda que pronto pelaron el cobre clientelista. En estos apoyos se cuentan mineros, gobernantes y exgobernantes locales y regionales y una gran cantidad de inversionistas que a la vieja manera de las cooperativas de Pablo Escobar, recogieron dinero para mandar la “merca” a la Alpujarra y esperar el retorno multiplicado de su inversión[23].

El montaje político incluyó un plato fuerte: las Empresa Púbicas de Medellín -EPM-, que fue la plataforma de promoción inicial del citado candidato que después de coronar la gesta, llegó a hacer lo mismo que hacían los que estaban antes, pero peor y más chambonamente. El relevo con los usufructuarios de la mayor empresa de servicios públicos del país no ha sido una transición negociada y pácifica. Por el contrario, todo ha sido una rebatiña plagada de cartas, comunicados, mentiras, renuncias, honores vulnerados y falso patrioterismo local edulcorado con el mentiroso discurso de la eficiencia, de los valores corporativos, del buen gobierno y del cuento bobo de la abnegación y el compromiso de ciudad de los codiciosos empresarios paisas.

Su cuento de independiente, su pelea a sombrerazos con un sector del empresariado local y su retórica antiuribista, han colocado a Quintero Calle, lo han posicionado, como un posible gran elector. Su última alianza con Petro le significa tener ingerencia en la elaboración de las listas para el Congreso del Pacto Histótico, definir su sucesión, ampliar sus apoyos, darle cobertura nacional a su casa poltica y apropiarse de una candidatura que hoy es ganadora[24].

Al final de todo no tenemos nada y todos hemos perdido. De la mano del Independiente llegó la pandemía y la ciudad ha quedado al garete, feriada entre los inversionistas de su campaña, asaltada en su buena fe, más pobre e inequitativa que antes, falsamente polarizada, y ad portas de otro megapeculado como el Metro de Medellín, solo que esta vez en la carrera 80 de la ciudad. Y como si fuera poco, con nuestras Empresas Públicas próximamente en bancarrota[25].

Con una revocatoria en curso y con una pelea colosal casada con el establecimeto local, Quintero será el sepulturero de una ciudad que encontró muy enferma, pero no en cuidados intensivos aún[26].

4. La Polis Criminal

Poco se habla en la ciudad del tema de seguridad a no ser cuando el alcalde sale a los medios a condenar la perfomanse de una modelo en un parque, o cuando lanza afirmaciones exorbitantes como la de que tenemos la mejor policía del mundo, o aquella de que el último asalto a una fundición de oro era una replica de la popular serie Casa de Papel. Como durante esta admnistracion desaparecio la información sobre la seguridad y la convivencia en la ciudad, los datos consignados a continuación son tomados de una reciente investigacion realizada por las universidades Eafit y Chicago.[27]

Dice el informe que, a pesar de los avances de la ciudad, su principal problema sigue siendo la presencia del crimen organizado ejerciendo un gobierno crimnal sobre 14 de las 16 comunas y tres de sus cinco corregimientos. “Esta estructura tiene la forma de una pirámide, cuya base está compuesta por alrededor de 350 grupos denominados combos. Los combos suelen estar compuestos por hombres jóvenes y sus actividades criminales suelen estar circunscritas a territorios pequeños y relativamente bien delimitados. La parte media de la pirámide está compuesta por entre 15 y 20 grupos denominados bandas o razones. Las bandas suelen estar conformadas por adultos con largas trayectorias dentro del crimen organizado y sus actividades no siempre están circunscritas a territorios específicos (de hecho, algunas se extienden hasta otras zonas del país). Mientras que las bandas son relativamente autónomas, la mayoría de los combos están subordinados a alguna banda. En el nivel superior de la pirámide se encuentran diferentes instancias de toma de decisiones colectivas en las que las bandas coordinan algunas de sus operaciones”.

Ademas de las actividades criminales relacionadas con expendio de drogas, extorsión, homicidios, gota a gota o pagadiario, elaboracion de licor adulterado, monopolio en la distribucion de elementos básicos de la canasta familiar como el gas, los huevos, las arepas y la leche; reclutamiento forzado de menores y desplazamiento forzado, entre otros, los combos ejercen el gobierno y control de las actividades comunitarias, resuelven la conflcitividad cotidiana y en muchos casos, castigan ejemplarmente a quienes violan ciertos códigos y normas de general aceptación.  En las zonas que controlan, muchas de estas organizaciones delincuenciales gozan de mayor confianza y legitimdad que el Estado y las autoridades mismas. Por eso la “polis criminal” enuncia un estado de cosas en las cuales la ley no regula las relaciones ciudadanas y el delito y el crimen se erigen en los caminos de ascenso social y bienestar. La confianza es reemplazada por el anicapital de la viveza y el “tumbis”.

Lo cierto es que gran parte de la ciudad esta gobernada por el crimen organizado y son las disputas o acuerdos a su interior, los que determinan la reducción y el crecimiento de los delitos en general y de los homicidios en particular. Del control territorial de los grupos delincuenciales muchos son los beneficiados. Si bajan los delitos y bajan los homicidios, ascienden los oficiales de policía, sacan pecho las autoridades y engrosan sus arcas los pillos. Lo cierto es que desde que se desmovilizaron los paramilitares urbanos del Bloque Cacique Nutibara, el cogobierno criminal de la ciudad prácticamente se formalizó y hoy hace parte de los acuerdos previos o posteriores a la elección de los gobernantes locales[28].

El Crimen organizado ha extendido sus tentáculos en la Fuerza Publica, la administración de justicia. la política y el gobierno de la ciudad. El crimen organizado criollo detenta un gran poder político y es mucha su incidencia en los gobiernos locales y departamental. Importantes cantidades de dinero fluyen a las campañas políticas y chorros mantienen el infernal ritmo de la construcción en Medellín, el Oriente antioqueño y el Valle de Aburra. Medellín es un centro de blanqueo de dineros provenientes del narcorafico y de la minería ilegal y es el Vaticano de actividades delictivas de toda laya: aquí se coordina, se cuecen  alianzas criminales locales y transnacionales, se arreglan las cuentas y se transan los procesos judiciales. Muchos puntos del PIB local se los debemos a los recursos que provenientes de actividades delictivas y mucho dinero sucio corre por las venas de la economia local.

5. El nuevo GEA: Gilinski Entrepeneurs Arabian

Los recursos provenientes de la minería y del café sirvieron de capital inicial a la industrialización paisa orientada básicamente a los textiles, a la metalurgia y a las confecciones. El notablato industrial y comercial local se conformó en torno a familias blancas elitistas, camanduleras y conservadoras que se relacionaban y cruzaban entre si, asistían a clubes sociales exclusivos y vivían en las afueras de la naciente ciudad de Medellín. Allí están los orígenes remotos del Sindicato Antioqueño[29].

Una burguesía pueblerina, avariciosa y discriminadora que confió la educación a los curas y hacía obras de caridad entregando casitas a los pobres. Una elite que se hacía llamar “clase dirigente”, trazó la ciudad desde la Sociedad de Mejoras Públicas y gobernó la misma como si hacerlo fuera un derecho natural. Hasta que llegaron los gobiernos plebeyos de políticos pueblerinos y dineros calientes y hubo que transar y acordar con ellos la mejor manera de gobernar. Todo el esfuerzo empresarial criollo zurcido como un entramado familiar de cruces accionarios y enroques empresariales, construido con tanto esfuerzo, especulación y viveza, resulta ahora amenazado por otro grupo económico, quizá mas astuto y poderoso, aunque foráneo. Judíos y árabes, quien lo creyera, se han confabulado para alzarse con lo último que quedaba en la tierrita:  las empresas del muy glorioso Grupo Empresarial Antioqueño[30].

La historia es bien conocida. Usando una figura propia del mercado bursátil y luego de haber estudiado detenidamente el comportamiento accionario de las empresas del llamado GEA, los banqueros Gilinski en asocio con un fondo árabe de inversiones, decidieron hacer una oferta publica de compra de acciones de Nutresa, una de las joyas del Grupo empresarial paisa. Por esta vía, cobraban  por ventanilla una vieja afrenta económica que estos empresarios habían cometido contra los Gilinski y de paso, penetraban un grupo conformado por un cruce accionario donde todos son propietarios de todo, o de casi todo, pues extrañamente en Nutresa no tenían la mayoría accionaria.

Como las acciones de Nutresa y en general de las empresas del GEA han estado por años subvaloradas en relación con el valor real de las empresas y como eran pocos los dividendos que le llegaban a los pocos accionistas que se mantenían como accionistas diferentes a sus dueños paisas, pues los Gilinski hicieron la oferta de comprar las devaluadas acciones con una atractiva prima y en la idea de tomarse el control de la empresa. Extrañado por la razón de que tan poderosas empresas estuvieran en el mercado accionario a un precio que no se correspondía con el valor de las empresas, un amigo me respondió lacónicamente: pues a los dueños no les interesaba compartir sus propiedades con nadie.

Final húmedo

Con EPM al borde de la quiebra, con un proyecto hidroeléctrico que dejará un pasivo mas grande que el mega robo del Metro de Medellín; con una la ciudad gobernada por los pillos desde hace décadas y el grupo empresarial orgullo de la región a punto de ser comprado por la tercera parte de su valor, estamos en presencia de la tormenta perfecta. Quintero Calle nos dará el empujoncito y de culos rodaremos hacia la gran represa ya desbordada. Porque lo que viene es la gran borrasca, la avalancha de hidroituango.

No faltará, en todo caso, el paisa que sacando la cabeza sobre las desbordadas y amarillentas aguas, grite a todo pulmón: ¡Somos la Berraquera!.

 

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[1] ver: https://elarmadillo.co/historias/la-historia-detras-de-los-premios-que-celebro-la-alcaldia-de-medellin/

[2] Ver: Federico García Barrientos, “Del lujo o la melancolía. Antioquia siglos XIX y XX”. Universidad de Medellín. Y ”Poder Regional y Proyecto Hegemónico.” Vilma Liliana Franco Restrepo, IPC 2006.

[3] Hace pocos días Víctor Correa, el excandidato del Moir a la alcaldía de Medellín, colocó en las redes sociales un video en el que lamentaba la pérdida Nutresa para Antioquia

[4] Antioquia es de una gran diversidad, por eso, cuando nos referimos a lo paisa no englobamos allí las gentes rivereñas del Bajo Cauca, de Urabá y del Medio Atrato.

[5]Ver:https://www.epm.com.co/site/Portals/0/centro_de_documentos/centro_de_contacto/relacion_estado/Anexo4-ConvenioMarcoRelacionesEPM-Municipio_001.pdf

[6] Ver: https://sinpro.org.co/noticias-1/717-lo-que-pesan-las-transferencias-de-epm.html

[7] Ver:https://www.epm.com.co/site/Portals/5/documentos/InformacionRelevante/2. Código de buen gobierno.pdf

[8]Entre las funciones de la Junta Directiva se encuentran las siguientes: Formular las políticas generales de las Empresas Públicas de Medellín E.S.P. y los planes y programas que deba desarrollar, aprobar los planes de negocios para los períodos que señale. Al hacerlo, se entienden autorizadas todas las operaciones incluidas en ellos y que se consideren necesarias para su cabal ejecución, tales como asignación de recursos, formas de financiación, fuentes de crédito, emisiones de bonos, titularización de activos, constitución de garantías, entre otras, autorizar la participación en sociedades, consorcios, uniones temporales o cualquiera otra forma de asociación permitida por la ley para el cumplimiento de su objeto.

[9] ver: https://www.eltiempo.com/colombia/medellin/costo-de-hidroelectrica-de-epm-en-panama-paso-de-50-a-314-usd-millones-182806

[10] ver: https://www.semana.com/nacion/articulo/el-negocio-salio-mal-epm/257160-3/

[11] ver: https://www.economiacolombiana.co/empresas-estatales/perdidas-de-hidroituango-alcanzan-los-4-billones-contraloria-general-de-la-republica-531

[12] https://www.portafolio.co/amp/economia/finanzas/hidroituango-joya-antioquena-286342

[13] ver:https://www.elmundo.com/noticia/UNE-Millicom-la-fusion-del-desastre-/362612

[14] ver:  https://caracol.com.co/emisora/2021/03/04/medellin/1614827310_713106.html

[15] ver: https://www.wradio.com.co/noticias/regionales/parque-los-cururos-dejaria-perdidas-a-epm-por-unos-700000-millones-de-pesos/20180904/nota/3794897.aspx

[16] ver: https://www.eltiempo.com/colombia/medellin/epm-si-habria-pagado-de-mas-en-antofagasta-41872

[17] Ver: https://www.larepublica.co/analisis/luis-perez-gutierrez-2991901/mas-verdades-financieras-de-epm-3095923

[18] ver: https://www.elcolombiano.com/antioquia/cultura-metro-de-medellin-cumple-30-anos-CC9260325

[19] Ver: https://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-380497

[20] ver:    http://historico.presidencia.gov.co/prensa_new/sne/2004/mayo/21/03212004.htm

[21]Ver:https://www.metrodemedellin.gov.co/memoria-informe-sostenibilidad/sobre-la-empresa/estructura-de-gobierno

[22] Ver: Quien es quien: Daniel Quintero Calle

[23] https://www.elcolombiano.com/antioquia/crei-en-quintero-y-me-equivoque-concejal-luis-bernardo-velez-NJ15945954

[24] https://www.lasillavacia.com/historias/silla-nacional/petro-aterriza-en-medellin-con-parches-promovidos-por-aliados-de-quintero/

[25] https://www.portafolio.co/negocios/empresas/irregularidades-epm-e-hidroituango-encontradas-por-superservicios-558132

[26]Ver: De castaño a Moreno

[27]“Gobierno Criminal en Medellín”. Eafit, Universidad de Chicago, 2020

[28] https://es.insightcrime.org/investigaciones/colombia-elites-crimen-organizado-don-berna/

[29] https://m.elcolombiano.com/historico/asi_nacio_el_sindicato_antioqueno-GAec_147414

[30] https://forbes.co/2021/09/07/red-forbes/el-gea-y-la-cohesion-de-las-elites-paisas/amp/

Jesús Ramírez, Abogado de la Universidad de Antioquia. Exsecretario de Gobierno de Medellín y Exgerente de la Empresa para la Seguridad Urbana de Medellín. Consultor independiente.

Foto tomada de: EPM