Según las encuestas, la gobernación de Boyacá estaría entre Ramiro Barragán quien ganó la consulta interna del partido y comenzó con un amplio favoritismo la campaña que se ha venido desplomando en el último mes y Jonathan Sánchez, hoy se habla de un virtual empate técnico, el primero con un 23% de la intención de voto llegando a su techo y Sánchez con un 18% en la intención subiendo en 5 puntos porcentuales; los restantes candidatos se encuentran lejos de los dos primeros, Jairo Castiblanco con un 5% de intención de voto, Gionany Pinzón con un 4% y Olmedo Vargas con el 3%, Cabe anotar que el 31% de los boyacenses encuestados aún no saben por quién votar y el 13% no votaría por ninguno .
La actual campaña a la gobernación se ha caracterizado por múltiples señalamientos contra los dos candidatos que encabezan la intención de voto, la Fundación Paz y Reconciliación en su informe Candidatos Cuestionados a Alcaldías y Gobernaciones, 2019, hace referencia a la cercanía de Sánchez con los esmeralderos del occidente de Boyacá, específicamente con el “clan Sánchez” y el “clan molina” además de tener el apoyo de Ciro Ramírez, el candidato oriundo de Otanche no ha desmentido el apoyo de los empresarios de las esmeraldas.
Por su parte, el candidato Ramiro Barragán enfrenta al menos 4 investigaciones disciplinarias que cursan en la Procuraduría Provincial de Sogamoso , constantes denuncias de favorecimiento del gobernador a esta campaña, participación de los contratistas de la gobernación en favor del candidato , el pre candidato Omar Franco Torres , ex director del IDEAM quién fue contendor de Barragán en la encuesta para definir la candidatura , renunció al partido aduciendo estas irregularidades, en las últimas horas, se conoció la demanda presentada ante el Consejo Nacional Electoral, solicitando la revocatoria del acto de inscripción de la candidatura de Barragán a la gobernación del departamento de Boyacá, en razón a que hasta el 29 de octubre de 2018 intervino contractualmente con el departamento como supervisor dentro del contrato 2049 de 2018. Ambos candidatos, tanto Ramiro Barragán, como Jonathan Sánchez han sido cuestionados tanto por la opinión pública, como por sus contendores por el gasto excesivo en publicidad y en el uso de helicóptero para los recorridos por el departamento.
Es de anotar, que Boyacá es el único departamento del centro del país en el que ganó el SÍ en el plebiscito y que el actual gobernador Carlos Amaya a tres meses de terminar su mandato cuenta con una imagen favorable del 73% según la encuesta del Centro Nacional de Consultoría lo cual indicaría que hay una franja de opinión que pudiera favorecer las aspiraciones del candidato del partido Alianza Verde quién ha desarrollado toda su campaña con la promesa de ser el continuador del gobierno actual, sin embargo, el departamento sigue siendo aún conservador y esto le daría el margen de favorabilidad a Jonathan Sánchez.
Tunja, capital del departamento tiene ocho aspirantes a la alcaldía, Alejandro Fúneme candidato por segunda vez a este cargo está avalado por una coalición impensable hasta hace poco, partido Conservador, partido Liberal y ASI , con el apoyo el candidato Jonathan Sánchez y en las últimas horas la adhesión de MIRA; Jhon Carrero, ex secretario de infraestructura del departamento, avalado por el partido Alianza Verde; Anderson Mendivelso, ex concejal , avalado por el partido de la U; Rafael Acevedo de Cambio Radical; Jorge Moreno avalado por ADA, (Alianza Democrática Afrocolombiana) y por el movimiento Tunja Productiva, Social y Participativa; Johana González, candidata del Centro Democrático; Marlén Fuerte, por Colombia Renaciente y el abogado Pedro Suárez Vacca con el aval de la coalición Unión Patriótica, Mais, Polo Democrático y Colombia Humana.
Aunque hasta la fecha no se han registrado encuestas de firmas encuestadoras ,ni de medios de comunicación, las realizadas por las diferentes campañas dan a Alejandro Fúneme como virtual ganador, Jhon Carrero que arrancó generando mucha expectativa por el capital político del gobernador Carlos Amaya, no logró despegar, se atribuye este hecho a la división que se produjo en el partido Verde por la candidatura a la gobernación, en la que el candidato del gobernador fue Ramiro Barragán y el candidato del senador Jorge Londoño era Omar Franco, aunque Barragán resultó vencedor en la encuesta y obtuvo el aval del partido, las denuncias y la renuncia de Franco dejó dividido al partido de gobierno. El que sí ha venido creciendo en su aspiración es Pedro Suárez Vacca, cabe anotar que Tunja se ha caracterizado en las últimas elecciones por el voto de opinión, para la segunda vuelta presidencial, Iván Duque obtuvo 35.83% de la votación y Gustavo Petro el 59.18 %, lo que favorece sin duda las aspiraciones del abogado Suárez Vacca.
Las otras candidaturas no se perfilan dentro de las ganadoras, Johana González quién perteneciera al gabinete de Carlos Amaya y que en determinado momento sonó como pre candidata del partido Alianza Verde, tiene en su contra el aval del Centro Democrático que no es de buen recibo en la capital boyacense, por su parte, Marlén Fuerte , ex concejal no cuenta con la estructura de partido político ya que Colombia Renaciente es la primera vez que aparece en el panorama regional, la campaña de esta aspirante hizo público su apoyo a Jonathan Sánchez para la gobernación pese a que el partido que le dio aval tiene a Olmedo Vargas como candidato para gobernar Boyacá. Anderson Mendivelso, ex concejal , Rafael Acevedo ex secretario de Infraestructura del municipio y Jorge Moreno, al igual que las candidatas no registran en la intención de voto de los tunjanos.
Con este panorama político de cara a las elecciones del 27 de octubre, en Boyacá y en Tunja su capital quedan demostradas varias cosas, la primera, las alianzas como la del partido liberal con los verdes para la gobernación y con los conservadores para la alcaldía deja en claro que la apuesta no es ideológica, es burocrática, en segundo lugar, el partido Alianza Verde sacará provecho del capital político del gobernador, pero también le pasará factura la división al interior del partido, las aspiraciones de los demás candidatos evidencian la improvisación en materia política que va de la mano de los avales de partidos y movimientos que no han hecho presencia nunca en el departamento y en la ciudad.
Tanto Ramiro Barragán como Jonathan Sánchez de llegar a la gobernación lo harán en medio de un manto de dudas sobre sus actuaciones, deberán enfrentar también la polarización que se vive en el departamento como en el resto del país y una difícil situación financiera que se agrava por el nivel de endeudamiento del departamento. La apuesta del partido Alianza Verde es la candidatura de Sergio Fajardo a la presidencia y Carlos Amaya como fórmula vicepresidencial según lo ha manifestado Claudia López , muy cercana al gobernador de Boyacá.
Por su parte, el Centro Democrático le apuesta a Jonathan Sánchez también con miras a consolidar el proyecto político a la presidencia del 2022, aunque aún no se perfila en cabeza de quién estará representado para esa contienda es claro que su mayor opositor será nuevamente Gustavo Petro.
Esta elección regional se ha definido en una frase muy utilizada en Boyacá: “Mucho cacique y poco Indio”, hace referencia a que aún está por verse la fuerza electoral que reclaman los nuevos “Encomenderos” por ejemplo el representante Wilmer Leal del partido Alianza Verde que obtuvo la mayor votación a la cámara de representantes y que según la última encuesta un 62% de los boyacenses afirman no saber quién es, después de un año de ejercicio en el cargo deberá hacer uso nuevamente de toda la maquinaria de la gobernación en favor de su candidato Barragán, a su compañera Neyla Ruiz que resultó electa por el mismo partido, el 83% de los encuestados no la conoce , a su principal aliado, el parlamentario liberal Rodrigo Rojas, cuyo padrino político es Plinio Olano, el 64% afirma no saber quién es, a los “caciques” políticos les va mucho mejor, Jorge Londoño es reconocido por el 74% de los boyacenses y Ciro Ramírez con el 69% , es aquí donde se define el “pulso” político en la región.
Por el contrario, en Tunja la apuesta política no se circunscribe al Centro Democrático y la Alianza Verde, la profunda crisis de la ciudad en todas sus dimensiones, sumado al caudal electoral del voto de opinión hace pensar que tenga la opción de elegir una propuesta coherente, hasta el momento podemos decir que Suárez Vacca es el único que se ha comprometido con la apuesta de una Ciudad Educadora, que piensa el desarrollo basado en la vocación de Tunja, el resto de los candidatos no han visualizado las posibilidades de desarrollo que la conviertan en una ciudad competitiva en los nuevos circuitos globales.
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María Clemencia Torres, Directora publicación Gato Negro.
Foto obtenida de: https://www.periodicoeldiario.com/
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