El diagnóstico que realiza Petro de la estructura económica en Colombia es muy pobre y se resume en lo siguiente:
- La estructura económica se caracteriza, básicamente, por ser una estructura rentista, que no crea riqueza, sino que se apropia de la riqueza mediante transferencias. Estas rentas se dan en distintos sectores: petróleo, minería, cocaína, sector financiero.
- El énfasis en la producción en ciertos sectores extractivistas ha conducido a una limitación en el desarrollo industrial del país, debido a fenómenos como la enfermedad holandesa, que abarata las exportaciones y restringe la producción nacional.
- En el sector de producción agropecuaria se ha mantenido una estructura de extrema desigualdad en la propiedad de la tierra y una persecución o desidia frente a los productores campesinos, que se ven sometidos a precarias condiciones de vida; incluso, se refiere al sector agropecuario como feudalismo.
- En los demás sectores productivos se ha mantenido una política de bajos ingresos y carencia de estabilidad laboral.
- La mitad de la población está excluida: se encuentra en el desempleo y en la informalidad, lo cual refuerza el panorama de bajos ingresos y precariedad laboral.
- El deterioro de los ingresos de los campesinos y de los trabajadores no rurales restringe la demanda interna para la industrialización.
- Las situaciones anteriores son resultado de una casta política temerosa que se ha plegado a los intereses rentistas y no ha querido adelantar las reformas para un mayor desarrollo.
Petro no describe y explica los problemas de fondo, ni tampoco profundiza en las causas, se queda en un nivel muy superficial. Aparentemente es muy progresista el discurso, pero se queda en el marco de la economía capitalista con todas sus características nocivas para los trabajadores. Hace énfasis en la dimensión productiva, tecnológica y descuida las relaciones sociales; su crítica de fondo se dirige a la “casta política” y no menciona para nada los intereses de los capitalistas. Veamos con detalle el diagnóstico.
Diagnóstico
Sostiene que el modelo económico se centra en la mono-exportación de petróleo y carbón. Señala que los factores principales que limitan la industrialización y el desarrollo son: a) el latifundio improductivo y el narco-latifundio; b) la degradación de la estabilidad laboral y el salario; c) la renuncia de la sociedad a mejorar la educación; d) las rentas provenientes del petróleo, de la minería y de la cocaína.
Plantea que el petróleo y el carbón sólo generan rentas, que son transferencias que no provienen del trabajo, dado que los minerales, el carbón y la tierra no son un proceso productivo, simplemente están ahí. Lo más fácil es coger lo que está ahí, esto es lo que hace una política depredadora. Las rentas provienen del aumento de la producción de petróleo y de la cocaína. Los mayores ingresos provenientes de los ingresos del petróleo, la minería y la cocaína generan la enfermedad holandesa que afecta a las demás actividades productivas, dado que la revaluación del peso abarata las importaciones y genera competencia ruinosa para la industria nacional. Así mismo, las rentas fósiles y de la cocaína se mueven en el sector financiero lo cual explica las mayores ganancias de los bancos; las utilidades crecen al 6% mientras que la economía real crece al 1%.
El énfasis del diagnóstico se pone en las rentas que son transferencia de riqueza y no producción de riqueza. Parte de la riqueza de la sociedad se traslada a los propietarios de la tierra (rentas del suelo) a los propietarios de bancos y fondos (renta financiera), a los propietarios de la cocaína (rentas de la cocaína) y a los propietarios del carbón y del petróleo (rentas extractivas). Las rentas matan la producción.
El uribismo y el vargasllerismo, bajo la falsa etiqueta de la seguridad jurídica, que no es válida para los trabajadores y los campesinos, lo que pretenden es legitimar el despojo y mantener el latifundio improductivo, sin fijarse que hay una enorme desigualdad. El campo es un feudalismo tardío y ensangrentado.
Los economistas clásicos siempre dijeron que la industrialización implica un cambio fundamental en el campo y la reducción en la renta de la tierra; es necesario un previo proceso de democratización agraria, como los procesos que se han dado en Estados Unidos, en Europa, China, Japón, Corea y Rusia.
La casta política ha olvidado hacer la reforma en el agro que se requiere para expandir la industria, prefiere vivir de las rentas. Condena a la sociedad a una economía raquítica sin puestos de trabajo y oportunidades. Se persigue al campesino, se reducen los salarios, se quita la estabilidad laboral, condenando a profesionales y trabajadores al infierno de contratos de 3 meses de duración, se reduce el mercado interno y no se permite la industrialización. La clase política ha generado una economía depredadora que se destruye a sí misma, una economía raquítica que no incluye a más de la mitad de los colombianos. La mitad de la población está excluida, se encuentra en el desempleo abierto, la informalidad, la baja productividad y los bajos ingresos.
La casta política poderosa, pero temerosa, no quiso hacer las reformas que implican la industrialización y que prometió en su momento Alfonso López Pumarejo. Las consecuencias de estas decisiones son la pobreza, el atraso y la enorme desigualdad.
Propuestas
Las propuestas de Petro están a un nivel muy general, son más bien objetivos, visiones, ideas generales, que líneas de acción concretas con metas específicas y medios para lograrlos. No tiene, por ejemplo, metas concretas en materia de reducción de la desigualdad ni de superación de las condiciones económicas que restringen la producción agropecuaria; hace supuestos heroicos sobre el poder del Estado para reorientar la producción. En lo fundamental es una propuesta liberal, es decir, una propuesta de un sector del establecimiento capitalista. En caso de llegar a la presidencia, va a encargarse de gestionar el modelo capitalista dependiente y atrasado.
La propuesta general consiste en convertir al país en potencia agraria y ambiental que permita el desarrollo integral de la industria. Para lograr esto es necesario reducir las rentas e incrementar la inversión productiva. Es necesario volver productivo el campo colombiano con sus 15 millones de hectáreas fértiles, de la cuales solamente se usan 6 millones; esto implica una nueva gestión del agro, reconstruir las instituciones del saber agrario, reorientar el crédito agropecuario y democratizar la propiedad de la tierra. Es necesario convertir al campesino en granjero y ciudadano y hacer mucho más productivo el campo, lo cual conduce a la agroindustria, a aumentar el valor agregado de los bienes primarios; todos los municipios podrían ser agroindustriales.
La propuesta es promover la agroindustria y generar millones de puestos de trabajo en los municipios mediante el cooperativismo agroindustrial; se trataría no de empleados sino de emprendedores dueños de sus cooperativas agroindustriales, al tiempo que se da vida y democracia a los municipios. La propuesta es volver a millones de colombianos empresarios, fundamentalmente a mujeres y jóvenes. No se trata de traer empresarios del exterior sino crear empresarios en el país.
Es necesario desarrollar el sector de bienes de capital para lograr una industrialización sostenible, producir máquinas y, especialmente, máquinas para hacer máquinas, actividades que son intensivas en conocimiento, y son fundamentales para estimular la economía. Esto requiere el desarrollo del mercado latinoamericano para contar con mercados externos y economías de escala. Es necesario también expandir la universidad pública con énfasis en la ciencia y la tecnología.
El desarrollo integral de la industria implica desarrollar los tres sectores: de bienes de consumo durable y no durable, de bienes intermedios, y de bienes de capital. Sin este último sector no funciona adecuadamente la industrialización. Una economía fuerte debe contemplar el desarrollo del sector de bienes de capital y de industria pesada que implica, reitera, un mercado más amplio que el mercado interno; no es posible industrializarse sin integración latinoamericana.
De otra parte, se requiere un amplio mercado interno lo cual implica buenos salarios, ingresos para los cooperativistas, ingresos para los campesinos, crecimiento de los ingresos reales de la mayor parte de la sociedad colombiana para que pueda crecer la industria.
Se requiere infraestructura específica en el campo para su desarrollo. Se propone infraestructura de agua, acueductos con agua tratada para garantizar agua de buena calidad en todo el país, no seguir consumiendo aguas sin tratamiento, y desarrollar sistemas de embalse de aguas lluvias en invierno para usar en época de sequías, adaptándose al cambio climático.
Es necesario desarrollar la red ferroviaria nacional articulada al metro y tranvía en las zonas urbanas. Se deben realizar un conjunto de vías nacionales articuladoras.
Se hará énfasis en la generación de energías limpias, es necesario democratizar la producción de energía. Ecopetrol será la empresa con mayor generación de energía solar.
Se extenderán las sedes universitarias en todo el país hasta llegar a 2.5 millones de nuevos estudiantes. Se incrementará el presupuesto para la educación superior, se estima que los 500 mil estudiantes por año tendrán un costo de 15 billones.
La industrialización se financiará con ahorro interno y externo. Actualmente este ahorro está en manos privadas en las pensiones bajo el control de los bancos y en salud en manos de las EPS, por cual es necesario reformar el sistema de pensiones y de salud. Se establecerá una fuerte banca pública que compita con la banca privada con el fin de llevar el ahorro a la inversión en la agricultura y la industria, mediante formas cooperativas a los granjeros. Se organizará un banco agrario e industrial de última tecnología con participación de los campesinos. Se aumentará el presupuesto recurrente con destino a la industrial.
Se requiere una reforma tributaria coherente con el modelo de industrialización, con tarifas muy altas a la tierra improductiva (lo cual incentivará su utilización productiva) incremento a las rentas financieras, impuesto al carbono a las importaciones, lo cual además serviría de protección a la industria nacional. Se eliminarán todas las exenciones y la posibilidad de transferir recursos a los paraísos fiscales. Se reformará el IVA para aumentar el consumo.
Finalmente, sintetiza su propuesta afirmado que se compromete a hacer las reformas que el liberalismo histórico incumplió, que se pueden resumir en la siguiente forma:
- Realizar un serio proceso de industrialización
- Impulsar el sector agropecuario y el cooperativismo
- Desarrollar la banca pública
- Disminuir las rentas
- Elevar salarios e ingresos reales y garantizar estabilidad laboral
- Reforma tributaria favorable a la producción
- Elevar el presupuesto de la educación
- Reformar el sistema pensional
- Promover la integración latinoamericana
La izquierda al servicio del capitalismo
Petro considera que es posible un capitalismo humano, esta es la esencia de su propuesta. Según su diagnóstico, la situación actual de atraso y exclusión se debe a la posición de una casta política que prefiere vivir de las rentas y no tiene interés alguno en el desarrollo económico del país, que no promueve su industrialización. Si se revisa con detalle el video y otros textos que ha escrito con enfoque programático en Cuarto de Hora, se observa que no hace referencia alguna a las características básicas del capitalismo, no cuestiona la división en clases ni la situación de los trabajadores asalariados. Para Petro no existe la explotación capitalista ni tampoco los rasgos esenciales del capitalismo. Muy brevemente podríamos señalar algunos cuestionamientos a su diagnóstico y propuesta con el fin de participar en el debate al cual nos invita.
a. No es cierto que la economía colombiana dependa fundamentalmente de la monoexportación. El peso del petróleo y la minería en el conjunto del PIB colombiano y del excedente bruto de explotación no supera un 10 %. Igualmente, en términos de trabajadores asalariados su participación es muy reducida. Obviamente tiene una importancia mayor con respecto al conjunto de las exportaciones y aporta una magnitud grande, especialmente el petróleo, a los ingresos públicos, pero sigue siendo una actividad capitalista más junto a las otras, donde hay mucho más valor agregado y excedente bruto de explotación.
b. La industrialización, el desarrollo económico, no es la finalidad específica del capitalismo. El objetivo fundamental, el motor, es la obtención de plusvalor, ya sea mediante ganancias industriales o comerciales, o mediante los intereses y los arrendamientos. La lógica de promover la “industrialización”, parece más apropiada para un país socialista, que para un país capitalista.
c. Aunque la industria colombiana es enana, en comparación con los países capitalistas más avanzados e incluso con Corea del Sur, es una buena fuente de ganancias para sus propietarios. No incluye un desarrollo importante de producción de medios de producción (maquinaria, etc.), pero si produce lo que más les interesa a los capitalistas: una buena masa de ganancias todos los años y una rentabilidad atractiva. Según el DANE, la relación excedente bruto de explotación sobre remuneración a los asalariados es muy alta en la industria manufacturera colombiana.
d. La demanda agregada es la suma de la demanda de los trabajadores asalariados, de los trabajadores por cuenta, propia, de los capitalistas y terratenientes, del Estado y del exterior. No puede, por tanto, atribuirse solamente a la baja demanda de los asalariados la responsabilidad por no estimular unas mayores ventas de la industria. Pero, además, la lógica dentro del capitalismo es mantener el salario lo más bajo posible, tanto en términos absolutos, como relativos. Entre más bajos los salarios relativos, mayor la proporción de plusvalor obtenido por los patronos; por esta razón las propuestas piadosas de Petro, de organizaciones sindicales y de mucho social demócrata, de subir los salarios para mejorar las ventas de los capitalistas, no pasa de ser un buen deseo sin fundamento serio.
e. La economía colombiana es una gran máquina de extracción de excedentes a los trabajadores y en este sentido cumple con su propósito para los dueños del país, es decir, para un puñado de capitalistas y terratenientes.
f. La economía capitalista se fundamenta además en el mejoramiento técnico que conduce a que exista siempre una población sobrante, que cumple un papel importante para el sistema, mantener a raya las pretensiones salariales de los trabajadores dado que hay siempre un exceso de oferta de trabajo sobre la demanda productiva. Este rasgo se agudiza en economías atrasadas, donde la penetración del capitalismo es menor y su inserción exportadora en la economía mundial muy baja; si se suma la población desempleada a la gran mayoría de la población trabajadora por cuenta propia, incluyendo los campesinos, se obtiene un enorme ejército económico de reserva que subsiste apenas, apoyado por las limosnas estatales y privadas. Pero esta no es una población “excluida”, en sentido estricto; desde la perspectiva capitalista está incluida como ejército de reserva y cumple un papel económico necesario.
g. Por tanto, la propuesta de Petro no apunta a un cambio de fondo de las estructuras y relaciones que determinan el funcionamiento del capitalismo, por lo que sus medidas no tienen mayor viabilidad.
Petro es, posiblemente, consciente de todas estas restricciones. Pero su interés es llegar a la presidencia y por tanto siente la necesidad de presentarse de una forma respetable ante los dueños del país. No se compara ni identifica con Chávez o Castro, ahora se compara con representantes connotados de la oligarquía liberal y toma las banderas de destacados defensores del sistema económico y político que exprime sin misericordia a la gran mayoría de trabajadores. Da cierta tristeza verlo enarbolando las banderas históricas del liberalismo.
Alberto Maldonado Copello
Foto tomada de: Diario La Opinión
Albert Sodemann says
Fundamental es una reforma agraria que permite generar empleo productivo en el campo y bajar migraciones hacia mega ciudades donde esperan tugurios y una economía de rebusque a las mayorías. los recursos no deben provenir de aumentos salariales sino de impuestos re distributivos sobre ingresos y latifundios. . Exigir una banca publica que administre los recursos financieros para canalizarlos hacia inversiones productivos y rentables me parece correcto. Para hacer mas rentable las inversiones nacionales se deben reconsiderar los convenios de libre comercio. En vez de excluir empresarios extranjeros es mejor invitarlos para asentar empresas en Colombia. El empresariado debe ser profesional y ético. Esto se logra mediante una educación de mejor calidad que la actual y un enfoque hacía una formacion teórica practica. Combatir eficazmente la corrupción publica.