El año pasado, 2022, Colombia exportó a Cuba solo 30,5 millones de dólares, mientras a República Dominicana 902 millones, siendo que las dos islas tienen tamaño de la población similar, alrededor de 11 millones de habitantes y estructuras de demanda similares sobre bienes y servicios de Colombia. Es obvio que el bloqueo de Estados Unidos a Cuba desde 1962 y que Trump en 2021 haya declarado a Cuba como un país terrorista -usando como pretexto el rompimiento de las negociaciones de paz entre el Gobierno Duque y el ELN, medida esta última que restringe las transacciones comerciales y financieras de terceros países con la mayor de las Antillas- constituyen medidas que operan en contra de los exportadores colombianos hacia Cuba. Pero esas no son las únicas razones.
Empresas de 65 países comercian regularmente con las empresas estatales y privadas cubanas. En el 2022 Argentina le exportó a Cuba 347,5 millones de dólares y a Brasil 377,8 millones. Venezuela, aunque con otro perfil, le exportó ese año 2.013,5 millones, según datos públicos de Cuba (ONEI). En consecuencia, las empresas de esos países conocen más que las colombianas las oportunidades y manejan mejor los riesgos en ese mercado, pero hacen ganancias. De eso se trata.
Producto del bloqueo económico, pero también por la caída del turismo durante la pandemia, los desastres causados en la agricultura por los huracanes, el encarecimiento de los insumos agrícolas e industriales dada la guerra en Ucrania, y producto de las propias limitaciones en la política económica, como lo reconoce el Gobierno cubano, la Isla atraviesa un período de desabastecimiento crítico. El 80 % de los alimentos debe ser importado y el parque industrial está ocioso, tal vez en un 70 %. Cuba es hoy una economía de servicios: 78 % del PIB son servicios, la industria 19,4 % y la agricultura 2,6 %.
Ante el tamaño del desabastecimiento de bienes, el Gobierno cubano ha tomado diversas medidas estructurales tendientes a la recuperación de la inversión en la agricultura y en la industria, medidas que pueden convertirse en oportunidades para inversionistas colombianos. Pero las decisiones de impacto inmediato, que presentan grandes oportunidades para las empresas colombianas, son las asociadas a la flexibilización institucional mediante la cual, desde 2021, se permitió la creación de empresas MIPYMES privadas con capacidad de importar, con la intermediación de empresas transitarias estatales pero manteniendo el negocio en cabeza de los empresarios privados (también hay empresas MIPYMES estatales pero de menor rol comercial).
En septiembre de 2022 ya habían sido creadas 1.700 MIPYMES. En noviembre de 2023 son 8.600 y contando. Desde 1962 esas empresas no existían formalmente en Cuba.
El sector empresarial no estatal, o Formas de Gestión No Estatal como las llama el Gobierno cubano, en el primer semestre del 2023 representó el 25 % de las exportaciones cubanas; 13 % del PIB nacional; 8.8 % de las importaciones y; 8 % de las ventas netas. En adición, se estima que el sistema empresarial estatal emplea 3.078.600 personas mientras el no estatal alcanza 1.506.600, entre los que se cuentan 617.000 trabajadores por cuenta propia.
La flexibilización institucional en curso no significa una regresión del modelo de economía centralmente planificada, pero sí la creación de alternativas empresariales públicas y privadas que deben ser conocidas y aprovechadas por los empresarios colombianos, como lo están haciendo los empresarios de otros países que no tienen las ventajas geográficas, de relacionamiento institucional y cultural que tiene Colombia con Cuba.
El panorama descrito de las relaciones comerciales y de integración de Colombia con Cuba está cambiando, para bien. En lo corrido de este año, hasta octubre, las exportaciones colombianas crecieron 99,9 % frente al mismo periodo del 2022. En la Feria multisectorial EXPOALADI, realizada en La Habana entre el 2 y el 4 de octubre, Colombia fue el país que más empresarios llevó a la Isla. En la Feria Internacional de La Habana, FIHAV, cumplida entre el 6 y el 11 de noviembre, evento al que concurrieron más de 800 empresas de 63 países, por Colombia participaron, con el auspicio de ProColombia, tres gremios del sector cárnico (Fedegán, Fenavi y PorkColombia) y cinco empresas comercializadoras de múltiples productos nacionales. Igual asistieron varios empresarios independientes con “maleta en mano”.
La destacada participación del empresariado colombiano en la FIHAV fue acompañada por el viceministro de Comercio, Industria y Turismo, Luis Felipe Quintero, la presidenta de ProColombia, Carmen Cecilia Caballero y la vicepresidenta Juliana Villegas, entre otros funcionarios colombianos, quienes cumplieron una apretada agenda de negociaciones con los ministros de Agricultura, Turismo y la viceministra de Comercio Exterior de Cuba, así como con autoridades cubanas del sector regulador de las importaciones de cárnicos y huevos. En esas conversaciones se concretaron nuevos acuerdos de admisibilidad a los productos colombianos. En adición, el 8 de noviembre el Gobierno nacional expidió el Decreto 1900 que pone en vigencia la ampliación de la desgravación arancelaria pacta con Cuba.
Pero eso no ha sido todo. En el marco de la FIHAV el 7 de noviembre se llevó a cabo el “Día de Colombia” con el lema “Colombia y Cuba, unidas por la paz”. ProColombia promovió allí la marca país mediante la realización de un evento cultural en la Plaza San Francisco de Asís de La Habana, la proyección de un mapping sobre El país de la belleza y la presentación de un grupo de danzas del Carnaval de Barranquilla. Al mismo asistieron representantes del cuerpo diplomático de las 116 embajadas presentes en La Habana, la ciudadanía y los empresarios invitados.
Durante el último año el presidente Gustavo Petro ha visitado dos veces La Habana, primero con ocasión de inicio de los diálogos de paz con el ELN y luego cuando la Cumbre del Grupo de los 77 más China. La vicepresidenta Francia Márquez y la ministra de Cultura Patricia Ariza estuvieron en febrero, cuando la Feria Internacional del Libro, donde Colombia fue el país invitado. El ministro de Comercio, Industria y Turismo, Germán Umaña, visitó la Isla en la FIHAV del 2022. Bajo la conducción del embajador José Noé Ríos, las relaciones diplomáticas y consulares entre Colombia y Cuba han sido plenamente restablecidas y consolidadas, con la participación activa de varios artistas y académicos de los dos países.
Las empresas colombianas que se han decidido a conocer las oportunidades y las propias dificultades del comercio con la mayor de las islas de las Antillas, que son en su mayoría medianas y pequeñas empresas, se están posicionando de forma estratégica en El Caribe y cuentan con el apoyo de las instituciones nacionales. Ese es el camino de la reindustrialización y de la integración de Colombia con la gran cuenca del Caribe.
Jorge Pulecio, Agregado comercial y Representante de ProColombia en Cuba.
Foto tomada de: Cubarte
Deja un comentario