En la primera parte del escrito sobre la izquierda, expuse de manera muy sucinta algunos asuntos ligados a su historia y en especial un pequeño y quizás incompleto inventario de las organizaciones que surgieron a través del siglo XX y lo que va del presente. Hoy pretendo exponer algunos puntos que creo debe caracterizar o representar a la misma, en este momento histórico nacional sin desligarse, claro está, del ámbito internacional.
Sabemos que en las direcciones nacionales de Colombia Humana y el Pacto Histórico, se debate sobre la necesidad y/o conveniencia de diluirse la primera y convertirse en un solo partido el segundo. Los diferentes enfoques que se mueven en su interior, harán que esta discusión en medio de las diferencias se resuelva ligero o dure más de lo deseado por quienes impulsan dicho paso. Es muy probable que esto se defina en el primer semestre del próximo año. El tiempo dirá si el cambio propuesto es acertado o equivocado. Si con ello se avanza o más bien obstaculiza y confunde o crea más grietas de las existentes. Si en este habrán colados que pretendan desvirtuar los objetivos y terminen convirtiéndose en “manguitos” o solo estarán quienes de verdad quieran al cambio y profundizar en la justicia social, ambiental y económica.
Aunque el llamado a la conformación de un Frente Amplio, es totalmente legítimo e incluso necesario en este periodo de transición democrática, donde se sumen otros sectores políticos representantes de los llamados partidos tradicionales que estén interesados en la transformación del Estado Colombiano, y que siempre se han identificado como parte de la derecha nacional, no se puede olvidar la génesis de la izquierda que en cualquier lugar del mundo ha sido la lucha por la justicia social y la igualdad en toda su extensión. No vaya a ser que por agraciarse con el establecimiento termine olvidando su razón de ser. Que no se caiga en que por lograr pequeños avances nos olvidemos de la misión principal.
Se debe reiterar en la ineludible profundización democrática en todos los aspectos de la vida nacional, desde la autonomía política-administrativa local y territorial, pasando por fortalecimiento de los espacios de participación ciudadana y su representación en los cuerpos de coadministración y control político, tanto a nivel municipal como departamental, hasta llegar al cuerpo legislativo por excelencia que es el Congreso de la República. Sino se democratiza la actividad política cotidiana no se logrará la democracia plena. Sino se construyen autonomías no habrá plena libertad para fortalecer los territorios en medio de la diversidad social, étnica, cultural y ecológica.
El neoliberalismo puso en marcha el desmantelamiento del Estado. Poco a poco ha ido entregando las funciones del mismo a la iniciativa del capital privado en desmedro de los intereses de lo público. Es nuestro deber recuperar y fortalecer el Estado para que esté en capacidad de responder por el bienestar de las mayorías y deje de estar al servicio de una elite económica. La educación, la salud, la solución al déficit de la vivienda, el transporte masivo, lo energético, el sistema vial, el acceso a la recreación y la actividad cultural, la plena libertad política, el empleo digno, la solidaridad social, la igualdad de género, la protección de la diversidad biológica, étnica y cultural, entre otras, deben estar siempre en la agenda de las organizaciones socio-políticas de la llamada izquierda y de los gobiernos progresistas y populares.
Desde diferentes expresiones de izquierda se ha caído en la trampa neoliberal de la reducción del Estado. Siguen proponiendo en ocasiones de manera casi histérica, que mermando el número de funcionarios disminuiría los costos del funcionamiento, sin pensar en que los requerimientos de las comunidades demandan de equipos cada día más sólidos para afrontar las tareas necesarias en busca del vivir sabroso en su integralidad. Disminuyendo el personal de las instituciones no se avanza en la solución a la múltiple problemática en los territorios. Otra cosa es que, para mejorar el cumplimiento de las funciones asignadas, deben ser llamadas aquellas personas que se comprometan íntegramente con las tareas que se asuman en la atención debida a las comunidades. El Estado y sus instituciones deben comprometerse en ser generador de empleo de calidad, brindado soluciones a la sociedad colombiana. No olvidemos que por igual necesitamos un Estado emprendedor tecnológico y agro-industrial.
La propuesta de creación del Ministerio de la Igualdad, que ahora dependerá del apoyo del Congreso de la República, puede mirarse como un aumento de la burocracia sin resolver de profundidad la desigualdad y exclusión que se presenta en nuestro país. Así Lo recuerdo ahora, cuando se presentó la discusión con la creación del Ministerio del Ambiente, que en su momento se denominaba INDERENA y dependía del Ministerio de Agricultura. Solo los necios pueden seguir pensando que fue un paso equivocado e innecesario.
La desigualdad y exclusión en Colombia es múltiple y su solución es compleja. Requiere de una institucionalidad fuerte y de políticas claras, con programas y acciones precisas para avanzar en su superación que tanto ahonda la crisis socio-ambiental que viven nuestros territorios. Debe ser un compromiso de la izquierda en su conjunto, el apoyar las medidas institucionales para el mejoramiento de dicha situación. Sino avanzamos en la edificación de una sociedad más igualitaria, la democracia no será una realidad. Si no damos este importante paso, el vivir sabroso solo será una frase más para entusiasmar multitudes.
Continuará…
John Elvis Vera Suarez
Foto tomada de: La FM
Nelson Guzman Baena says
El articulo SIEMPRE A LA IZQUIERDA II de mi amigo John Elvis Vera Suarez me permite precisar que se requieren cambios estructurales y no simples cambios por formalidad mas nunca obedeciendo a las condiciones históricas concretas que vive Colombia y América Latina. Solo la unidad y el convencimiento colectivo nos lleva al éxito y hay que tratar de persuadir a los oportunistas para esta noble labor político, económico, social y ambiental. Este articulo es pedagógico y ha notable ejercicio el de John Elvis.
Nelson Guzmán Baena
Responsable Comisión Técnica e Investigación (Unión Internacional de Sindicatos) de P y J (Pensionistas y Jubilados) de la FSM (Federación Sindical Mundial). Miami (La Florida U.S.A.)) 2 de diciembre de 2022