Ventana de oportunidad y esperanza

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En Venezuela se ha venido forjando desde 2017 una zona de encuentro plural e incluyente entre académicos, empresarios, trabajadores, iglesias, activistas de organizaciones sociales, sindicales y estudiantiles. Tras cuatro años de acercamientos surgió el Foro Cívico Nacional, con el respaldo de 161 personas y 74 organizaciones como Diálogo Social, Fedecámaras, Movimiento Ciudadano Dale Letra, Academia Nacional de Medicina, Federación de Trabajadores de la Salud, la red Sinergia, Centro de Justicia y Paz (Cepaz), la Federación de Asociaciones de Profesores Universitarios de Venezuela (Fapuv), etc. Todos ellos le apuestan a un diálogo que convoque a los venezolanos y propicie un acuerdo que evite más víctimas y avance en la edificación del porvenir.

Espacio ciudadano no partidario ni antipolítico

El Foro se asume como un tercero que procura coadyuvar en la construcción de condiciones necesarias para una negociación. Aunque las crisis venezolanas tienen origen político, son los mismos grupos políticos en conflicto durante los últimos 21 años, los que tendrán que lograr acuerdo para construir soluciones. El Foro no intenta sustituirlos ni tienen aspiraciones de poder político.

El Foro se define como convergencia de múltiples actores, que motivan a la sociedad y presionan al liderazgo político oficialista y opositor para que busque salidas. Algunas voceras del Foro reiteran que -como dice Mariela Ramírez de Dale Letra- “No estamos en contra de los partidos políticos. Al contrario, estamos convocándolos a que regresen a la política para la restitución del Estado de derecho y el restablecimiento de nuestra democracia”. Keta Stephany, de Fapuv, agrega: “Aquí se necesita un clima libre para que se dé el diálogo… que produzca resultados reales”[1]. Ramón G. Aveledo, quien fue secretario de la Mesa de la Unidad Democrática 2009-2014, señala que hasta ahora el modo de enfrentar o ignorar los muy grandes y graves problemas de Venezuela, sólo ha contribuido a empeorarlos. Por eso con el Foro Cívico quieren atreverse “a vernos cara a cara e intentar entendernos para superarlos[2].

Como las condiciones políticas que permitan solucionar la crisis no están dadas, consideran que pueden ayudar a construirlas. Presionan para que ambos lados recuperen canales de comunicación y concreten una ruta realista[3] que propicie la solución de los múltiples problemas que enfrenta Venezuela, incluida la compleja emergencia humanitaria.

El Foro Cívico tuvo su primera sesión formal el 8 de diciembre del 2020 y su presentación pública el 5 de febrero 2021. Ahí, Consultores 21 presentó los resultados de la investigación “Entender la participación ciudadana y la asociatividad”, que muestra cómo el pueblo venezolano está absorto por la sobrevivencia, no cree que la política conduzca a soluciones, piensa que participar es una pérdida de tiempo y tiene miedo de presentarse y de quienes dicen representarlo. La desesperanza aumenta con el fracaso de los intentos de negociación, el régimen aferrado al poder, y una oposición fragmentada y alejada de la población.

A partir de la experticia de cada participante, el Foro trata de suscitar acuerdos sectoriales que abran soluciones concretas, muestren a los políticos el único camino que evita un desastre, y a la ciudadanía, que la negociación puede ser beneficiosa. Estimula la articulación del reclamo social con la exigencia de un acuerdo político y una presión coordinada con la comunidad internacional, que obligue al poder a negociar y a la oposición a concretar acuerdos.

Además de lanzar llamados a la movilización, el Foro fijó su ruta, “Es tiempo de entendernos”, con 10 puntos[4]:

Compromiso indeclinable con el camino de la paz, el entendimiento y la construcción de una solución negociada, que tenga a la gente en el centro de su acción.
Solución pacífica, constitucional y electoral al conflicto.
Foro como espacio de articulación y acción plural de actores sociales para contribuir a edificar una pronta solución a la grave situación de millones de venezolanos, dentro y fuera del país.
Voluntad de actuar con decisión ante graves problemas y para restablecer la institucionalidad democrática.
Que las fuerzas opositoras definan, apoyadas en la sociedad civil, una hoja de ruta para concretar acuerdos con el grupo en el poder.
Foro guardián y garante de espacios de diálogo genuino entre las partes para cambiar las condiciones de vida.
Exigen a quienes detentan el poder, atención urgente de los males que afectan la nación, cumplimiento de la Constitución y los pactos internacionales, rediseñar con la oposición mecanismos de negociación para un porvenir de paz, bienestar y progreso para todos.
En múltiples encuentros con todo el espectro político, el Foro ha pedido conformar un marco permanente de principios y prácticas compartidas que conduzcan a solucionar la emergencia social y a reinstitucionalizar la democracia.
Asuntos inaplazables trascienden las diferencias políticas y no contradicen los esfuerzos por el restablecimiento de la democracia: acuerdos urgentes para activar vacunación y atender el grave estado de salud, alimentación, educación, y defensa de la soberanía territorial.
Piden a la comunidad internacional que apoye los esfuerzos que se adelantan desde la sociedad y exija de todos los actores políticos acuerdos progresivos que beneficien a la población, que no interfieran la solución del problema político, sino que ayuden a establecer confianza y mecanismos de negociación para un Acuerdo Democrático Nacional.

Avances en acuerdos parciales

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) propició tres reuniones entre representantes de ambas partes. Luego de varios aplazamientos, se llegó al acuerdo que la Oficina de Control de Activos Extranjeros de Estados Unidos entregara al sancionado Banco Central de Venezuela US30 millones para conseguir 12 millones de vacunas. El embajador de Estados Unidos para Venezuela felicitó a Guaidó y a Maduro por el acuerdo, y anunció que descongelaban esos fondos. Una adecuada implementación de todo el proceso, incluida la cadena de refrigeración, requiere del aporte del sector privado, instituciones, la Fuerza Armada Nacional y sociedad civil.

Desde agosto 2020, el Foro Cívico venía conversando con la Cancillería venezolana sobre la respuesta humanitaria. Aprovechó la urgencia de la vacunación para apoyar una negociación. Con la Academia Nacional de Medicina y exministros de la Salud trabajó en una propuesta de acuerdo. Se puso en contacto con la OPS, con el oficialismo y con la oposición para que acordaran un plan de diversificación de fuentes de vacunas y vacunación sin discriminaciones.

Los trabajadores miembros del Foro celebran ahora las “victorias tempranas”: el acuerdo para la importación de vacunas, el diálogo del presidente de la Asamblea Nacional oficialista con Fedecámaras sobre la modificación de leyes del sector económico, y la posibilidad de que el sector privado vacune a sus trabajadores. Piden aplicar los acuerdos con OIT de diálogo tripartito -gobierno, empresarios y trabajadores- y libertad de dirigentes[5]. Han logrado un pequeño paso al parar un ataque a Azul Positivo y lograr la liberación de algunos sindicalistas detenidos.

En el menú de posibles soluciones tempranas, el Foro ha tenido una recepción ambivalente debido a la polarización y desconfianza entre los actores políticos de ambos lados. La población no conecta su supervivencia con la situación del país ni hay unidad entre organizaciones sociales. Por eso, el Foro quiere suscitar el diálogo entre todas ellas.

Elección de un nuevo árbitro electoral

Otro esfuerzo del Foro Cívico ha estado dirigido al retorno al Estado de derecho y la búsqueda de un futuro democrático con bienestar y progreso para todos. Ha tratado que el régimen deje de hacerle la vida imposible a la oposición y que los opositores abstencionistas abandonen esa estrategia y, más allá de las diferencias, luchen juntos por sus derechos civiles y políticos a elegir y ser elegidos. En 2018, las mesas de entendimiento electoral generaron más de 300 propuestas para la reconstrcción de la ruta hacia elecciones justas y verificables, que requieren devolver las autoridades legítimas a los partidos, rehabilitación de políticos, escoger un árbitro imparcial y lograr observación internacional.

De las garantías mínimas exigidas hace parte la conformación del Consejo Nacional Electoral (CNE). No es fácil escoger a sus miembros en un régimen autoritaritario y con un agudo conflicto político, pero las conversaciones que adelantan sectores oficialistas y opositores podrían haber generado la extensión de 22 días del lapso de postulaciones. La AN oficialista, cuya legitimidad es cuestionada dentro y fuera de Venezuela, ha puesto en marcha la designación de autoridades electorales para 7 años.

El Foro Cívico postuló, el 2 de marzo del 2021, a 15 expertos electorales como candidatos al CNE[6], quienes proponen que, para equilibrar el poder en ese órgano, la escogencia representativa de los 5 rectores principales se extienda a los 3 suplentes que supervisan órganos y determinan cómo se organizan las elecciones, qué partidos y electores participan, dónde y cómo votan[7].

La Junta Nacional Electoral dirige el proceso técnico-logístico, supervisa y controla elecciones y referendos: cronograma, listas elegibles, circunscripciones, número y ubicación de centros y mesas de votación.
La Comisión de Registro Civil y Electoral planifica, depura y controla el padrón de votantes.
La Comisión de Participación Política y Financiamiento actualiza el registro de inscripciones de organizaciones políticas, controla el financiamiento de partidos, campañas, grupos de electores y asociaciones que postulen a cargos de elección popular.

El régimen solo le ha concedido un espacio a la oposición en esta última y en la vicepresidencia del poder electoral, que es administrativa. Es tal la importancia de un CNE independiente que, si se lograra instaurar una negociación política, podría llevar a flexibilizar sanciones económicas que han afectado no sólo al régimen sino al país.

Así lo destacan miembros del Foro Civico. Ricardo Cusanno, presidente de Fedecámaras, dijo: “queremos que la política sea política, que el voto sea el mecanismo para dirimir las diferencias” y, aunque esperan que la comunidad internacional pueda ser un garante, agregó: “pero esta situación es de nosotros y no de terceros”[8]. José Domingo Mujica, director de la Red de Observadores Electorales de la Asamblea de Educación, señaló: “Abordamos ese trabajo sin ingenuidades, sabiendo que es un primer paso, que hay muchas cosas por corregir. Sabemos que la decisión final obedece a una negociación entre actores políticos, pero aspiramos a que la evaluación justa de cada currículo, las características de imparcialidad, formación académica e independencia que sopesamos en ellos” sean tomadas en cuenta para un CNE equilibrado[9].

Hay quienes temen que el Foro Cívico se reduzca a una de tantas iniciativas que han surgido y se han ido extinguiendo, como la Coordinadora Democrática (CD), una coalición de 24 partidos políticos, asociaciones civiles y ONG venezolanas opositoras a los gobiernos de Hugo Chávez, que promovió un gran paro de diciembre de 2002 a enero de 2003, y el referendo contra Chávez en 2004, o como el Frente Amplio Venezuela Libre, que convocó grandes manifestaciones contra el régimen de Maduro en 2018.

Desde 2019, Guaidó venía exigiendo el cese de la usurpación, un gobierno de transición y elecciones libres, mantra que no surtió efecto. Ahora ha modificado su estrategia y habla de cinco pilares: construir la mayor y mejor unidad posible, rescatar la capacidad de movilización y presión interna, atender la emergencia humanitaria compleja, fortalecer la alianza internacional de presión, y lograr elecciones libres y justas.

Gran desafío tiene el Foro Cívico de tratar de ayudar a que la oposición reaglutine sus fuerzas con sectores sociales e incluso con el chavismo disidente, dialogue con el oficialismo para concretar acuerdos que sean respaldados por la mayoría de venezolanos y que abran la posibilidad de elecciones libres, con reglas justas y resultados verificables para reconstruir el país.

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[1]https://cepaz.org/noticias/el-foro-civico-nacional-es-un-espacio-diverso-plural-incluyente-que-busca-la-reinstitucionalizacion-del-pais/

[2] https://ultimasnoticias.com.ve/noticias/opinion/foro-civico/

[3] https://alnavio.es/noticia/21487/venezuela/mariela-ramirez:-en-el-foro-civico-nacional-creemos-que-podemos-coadyuvar-a-sacar-a-venezuela-de-la-irresolucion-politica-y-del-estancamiento.html

[4] https://forms.gle/ZQZj3moXFxWdfYub9